“Artículo 1: La Municipalidad de Olavarría apoya decididamente la formación de la Cooperativa de Luz Eléctrica de Olavarría”. “Artículo 2°: Las acciones no serán de un valor mayor de cincuenta pesos y podrán cubrirse en cuotas mensuales de dos pesos”.

“Artículo 3°: Declarase adherida la Municipalidad como cooperadora, de la Sociedad mencionada, con un número de acciones que se fijará una vez que se haya suscripto el capital inicial por parte del vecindario”.

“Artículo 4°: Una vez constituida la Sociedad, la Municipalidad adjudicará a la misma el servicio de alumbrado público con exclusividad de toda la otra institución similar” (…)

El 4 de noviembre se realizó una asamblea en la que se dio atribuciones a la comisión organizadora para elaborar los estatutos, que una vez creados fueron entregados a todos los “vecinos adherentes” a la Cooperativa. Mientras tanto el 1 de diciembre de 1928, se hizo cargo de la usina de la ex SALEO, la SUDAM como compradora de la totalidad del paquete accionario. El “trust” americano buscaba una concesión por diez años, ya que el acuerdo existente con la SALEO condicionaba la concesión del servicio hasta agosto de 1930, término por demás exiguo para ponerse a redoblar las inversiones que hacían falta.

El 1929 la Cooperativa Municipal de Electricidad puso en marcha la suscripción de acciones y simultáneamente, el directorio realizó una evaluación de mercado para conocer el número probable de consumidores que la Cooperativa sumaría cuando tuviera su propia usina. La suscripción de acciones se vio contenida y la Compañía Sudamericana, a la que se le vencía el plazo de concesión, duplicó su oferta acerca de la reducción de las tarifas de electricidad y fuerza motriz. En septiembre, la revolución que abatió al gobierno radical prolongó la demora en la vuelta de las instituciones representativas.

En 1931 la Cooperativa ganó un amplio reconocimiento por parte de las autoridades municipales y eso dio lugar a la consolidación del movimiento cooperativo. A fines de ese mismo año obtuvo la Personería Jurídica, quedando inscripta en el Registro de Cooperativas del Ministerio de Cultura.

Al año siguiente se construyó el edificio de la Usina y en 1933 obtuvo la concesión del servicio por el período de 20 años, a partir de una Ordenanza Municipal. De esta manera comenzó la reducción de las tarifas y la adquisición de equipos que demandaba la prestación del servicio. La década del ‘40 fue marcada a nivel socioeconómico por la Segunda Guerra Mundial, y en ese contexto la Cooperativa afrontó el aumento en los costos de insumos y mantenimiento.

A pesar del panorama poco alentador, se mantuvo el costo de las tarifas para no afectar a los socios.

Años después la Municipalidad cedió por diez años la red de alta tensión, con el fin de economizar el costo del servicio. Con el correr del tiempo, se llevaron los servicios a localidades vecinas e industrias, por lo que comenzó a necesitarse mayor potencia. Así fue como se amplió el edificio donde funcionaba la usina y se invirtió en la compra de nuevos motores y transformadores. Para esa época la cantidad de socios ascendía a 9.900.

A principio de la década del ‘60 se extendió la red a la zona serrana y al mismo tiempo se logró el paso de nivel de tensión de 6.600 a 33.000 voltios. Los socios ascendieron a 16.000 y se inició la prestación a las cementeras que se ubicaban en la región.

En 1979 se reformuló el Estatuto que habilitó a la Cooperativa para prestar el servicio de sepelio para el asociado y su grupo familiar.

En 1984 se aprobó la incorporación de la Cooperativa de Luz y Fuerza de Espigas Ltda. que permitió la provisión de luz a las localidades rurales de Recalde, Espigas y Blanca Grande.

Años más tarde se inició el servicio de Seguridad Eléctrica financiando la provisión de disyuntores y llaves térmicas, comenzaron los trabajos para expandir la red eléctrica a otras zonas rurales y se implementó una tarifa para jubilados con subsidios propios.

Para 1995 el 75% de la población estaba cubierta con el servicio de velatorio y varias avenidas y los accesos a la ciudad fueron iluminados con recursos de la Cooperativa que ascendían a los dos millones de pesos.

El año 1996 es muy importante para la institución porque se ganó la licitación internacional y se firmó el contrato de concesión por 20 años del Servicio de Obras Sanitarias. Posteriormente se implementó el servicio de Inhumación y se firmó un convenio con el cementerio Loma de Paz y con la Caja Mutualista Obreros de Cemento San Martín de Sierras Bayas. En aquel año se dictó la ley 11.769 como marco regulatorio eléctrico, a partir del cual la provincia fija las tarifas de energía.

En el año 2001 se implementó el Sistema de Gestión de Calidad en el Servicio de Obras Sanitarias y año tras año Coopelectric ha aprobado las auditorias realizadas por la empresa certificadora BVQI, poniendo de manifiesto la apuesta por la mejora continua de todos sus procesos y la calidad con la que se brinda el servicio. En cada una de las auditorias no sólo se evalúa si los estudios fisicoquímicos y bacteriológicos cumplen con los parámetros establecidos por el Código Alimentario Argentino, sino que se controlan las áreas operativas de Olavarría y Sierras Bayas, compras, seguridad, recursos humanos, administración, finanzas, comercial y comunicación institucional de Coopelectric.

En 1997 se renovó el contrato de concesión, por 25 años, para la prestación del Servicio de distribución de la Energía y alumbrado público; se incorporó el servicio de Gas Licuado a Granel, abastecido por la firma YPF Gas y se lanzó el Servicio de Internet Coopenet. Un año más tarde se adquirieron siete líneas de media tensión de la Provincia en nuestro Partido, por lo que Coopelectric pasó a ser propietaria de la totalidad de las líneas de media y baja tensión en la ciudad de Olavarría.

En 1999, se adjudicó la obra para la construcción de la nueva Planta de Tratamientos de Líquidos Cloacales y optimización de la existente.

El nuevo siglo llegó con la implementación de la Tarifa de interés Social (TIS) y en el 2003, luego de la crisis que afectó a los argentinos, Coopelectric realizó una nueva apuesta para beneficiar a la comunidad. Aggiornándose en cuanto a la utilización de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (Tic’s), y teniendo en cuenta que muchas familias no podían afrontar los costos que insumía el estudio universitario de sus hijos en otras ciudades, se optó por instalar el Centro de Estudios Universitarios de Coopelectric.

En tal sentido, se firmaron convenios con la empresa Aldea Global que ofrecía carreras de varias universidades privadas de todo el país y se instauró la modalidad de estudio a distancia y virtual. Por aquel año también se creó una alianza estratégica con Infracom S.A., trayendo a Olavarría un nuevo servicio de telefonía pública que actualmente cuenta con gran cantidad de abonados.

Asimismo, en el 2004 se puso en funcionamiento el servicio de banda ancha.

En 2007 se sumó una nueva prestación a los servicios sociales, se inauguró el horno crematorio que se convirtió en una alternativa no sólo para los olavarrienses, sino también para las ciudades de la región. Tiempo después se sumó la posibilidad de ofrecer microcréditos a quienes por su condición socioeconómica y laboral no podían acceder a un crédito financiero en una entidad bancaria. De esta manera se financiaron microemprendimientos productivos, ayudando a varias familias de la ciudad.

En el 2010 el Municipio otorgó a Coopelectric la obra de instalación, puesta en marcha y mantenimiento de un moderno Sistema de Monitoreo de Seguridad Ciudadano, con más de 50 cámaras ubicadas en distintos puntos de la ciudad.

En 2011 se incorporó la prestación de un nuevo servicio tras realizar un acuerdo con el Banco Credicoop y la Cooperativa Cabal. Se trata de la tarjeta de crédito Fraterna-Coopelectric, que se ofrece a los habitantes de la ciudad para que puedan comprar y financiar lo que necesiten en los más de 200 mil comercios adheridos a la Red Cabal que existen en Argentina.

Además entre sus novedades, se destacan la previsibilidad a través del Pago Amigo, que permite abonar un monto inferior al pago mínimo, y la solidaridad ya que con las compras que se realicen en cualquier punto del país se colabora con instituciones de bien público de Olavarría. Actualmente, la división Obras Sanitarias se encuentran realizando obras de extensión de redes y cloacas, a partir del plan impulsado por el Gobierno Municipal.